La gentrificación está ocasionando el aumento por arriba del 100% en los precios de renta en CDMX
En la CDMX esto se ha intensificado en barrios como la Roma, Condesa, Narvarte, Del Valle, Escandón, entre otros, que han experimentado una radical transformación, desplazamiento de residentes y negocios tradicionales, así como speculación que dispara absurdamente los precios de renta.
¿Qué es la gentrificación?
La gentrificación se refiere al proceso por el cual áreas urbanas antes degradadas o menos valoradas experimentan una revitalización, atrayendo a nuevos residentes de ingresos más altos, inversiones en infraestructura y servicios, y cambios en la dinámica social y cultural.
Este proceso puede llevar a un aumento significativo de los precios de la vivienda y la renta en estas zonas gentrificadas, ya que la demanda por vivir en estas áreas revitalizadas aumenta, lo que a su vez impulsa los precios al alza. Los residentes existentes, especialmente aquellos con ingresos más bajos, pueden enfrentar dificultades para pagar los nuevos precios de alquiler, lo que lleva a la preocupación por la pérdida de diversidad socioeconómica en esas áreas.
En el caso específico de la CDMX, se ha observado un fenómeno de gentrificación en ciertas colonias, que han experimentado un cambio significativo en los últimos años. El aumento de la demanda debido a la revitalización, el desarrollo de nuevas infraestructuras, la llegada de servicios exclusivos y la inversión en remodelación de propiedades son factores que han influido en el encarecimiento de la vivienda y los precios de renta en estas zonas.
Es importante tener en cuenta que la gentrificación es solo uno de los muchos factores que pueden afectar los precios de renta en la CDMX, y también pueden influir otros factores como la ubicación, la oferta y demanda de vivienda, políticas gubernamentales, entre otros.
De continuar esta tendencia desregulada de gentrificación, los efectos negativos serán mayores. Se requiere de política pública para proteger a la población vulnerable y hacer valer su derecho a la vivienda, frenando abusos en los precios de arrendamiento. Es un problema social complejo pero urge atenderlo.